La Revolución Francesa (1789) - Introducción

Como este es el hecho que pone inicio a la época en que estamos, es conveniente analizarlo.

En 1778 en Francia se vivió una gran crisis económica, lo que provocó un descontento de las clases populares (campesinos, comerciantes, obreros) que se unieron contra el gobierno y exigieron solución a la crisis. El malestar se hizo sentir aún más cuando la corona se declaró en banca rota a causa de la participación en la guerra de independencia de Estados Unidos en contra de Gran Bretaña.

Aparte de eso, las arbitrariedades y el abuso del antiguo régimen motivaron el alzamiento del poder popular, quienes se inspiraban además en las obras de los enciclopedistas que difundían deseos de reforma.

Fuente:

http://www.mflor.mx/materias/temas/ecocon/ecocon.htm

El comienzo de una nueva era

La historia contemporánea comienza con la Revolución Francesa, en 1789. Se inicia con un cambio, que afecta la manera de pensar del mundo entero.

Esta es nuestra época; el impulso que nos dieron al comienzo dura hasta hoy, llevando a grandes cambios mundiales de todos tipos; sociales, culturales, políticos, económicos, científicos, demográficos, tecnológicos y un largo etcétera. Es esta, quizás, la más distintiva característica de este período: el mundo globalizado, donde todo afecta a todos y todo importa a todos.

Aunque algunos sugieren que la era contemporánea ya acabó y que estamos en una nueva, lo cierto es que el mundo acelera y somos nosotros los que estamos pisando el acelerador.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Edad_Contempor%C3%A1nea